De Berlín a Casa del Lago
Aidan Baker presentó su música experimental
El músico canadiense combinó diversos géneros como posrock, electrónica, neoclásica, jazz y shoegaze
En esta, su primera vez en México, Aidan Baker le dio un enfoque experimental y ambiental a su música, combinó diversos géneros provenientes del posrock, la electrónica, la música neoclásica, el jazz y el shoegaze.
Aidan Baker nació en Toronto, Canadá, en 1974. Sus padres eran músicos y le inculcaron una manera de ver el mundo desde la perspectiva sonora. Al crecer conoció diversos estilos musicales y fue con Weather Report e Isao Tomita que emprendió la búsqueda de su propia ruta.
“Siempre hubo música en nuestra casa, desde que era muy pequeño. Lo que significa que escuchaba mucho de lo que hacían mis padres, que era principalmente jazz y música clásica”, comentó Baker a Gaceta UNAM.
Más tarde se orientó hacia la guitarra, teniendo como inspiración a Steve Albini, PJ Harvey, Bill Frisell, Justin Broadrick, Caspar Brötzmann. En su playlist del día a día también se puede uno topar con Swans, Stina Nordenstam, Red House Painters, Neurosis, Godflesh, James Plotkin, que, a lo largo de su vida musical, han sido influencias para la creación de diversos proyectos relevantes tanto de solista como en agrupación.
Baker cuenta con más de 100 producciones musicales en las que ha quedado la impronta de su entrega prolífica, y donde ha colaborado con diversos personajes del medio como Tim Hecker, Carla Bozulich, Jussi Lehtisalo, Andrea Belfi, y en especial con su duo Nadja. En su más reciente lanzamiento en solitario Everything is like always until it is not busca experimentar con más instrumentos para probar algo nuevo, crear un nuevo estilo o un género e incluso una técnica que, al momento de surgir, pueda servir de inspiración para futuros proyectos.
“La mayoría de mis lanzamientos en solitario son sólo de guitarra eléctrica, pero Everything is like always until it is not está más estructurado, con guitarra, bajo y batería. Aunque toqué todos los instrumentos, siento que esta producción puede sonar más como una banda que como un solista” menciona Baker.
Para celebrar que el músico ha completado recientemente una trilogía de trabajos en solitario, su último lanzamiento también se presenta en una edición especial en formato de casete, limitada a 60 copias. Es cierto que se considera un músico de la vieja escuela y que ha producido ya antes casetes y discos de vinil, pero su música está presente en plataformas digitales. “El internet ha sido a la vez una pesadilla y una bendición para la industria musical”, comenta Aidan.
Después de conocer Europa, Japón, Australia, América del Norte y del Sur, Baker llegó a México, con interés por conocer la música de algunos artistas nacionales contemporáneos que trabajen en el mismo estilo musical. “Conozco algo de historia mexicana y estoy familiarizado con parte de la cocina, pero no tanto con la música de aquí. Sería bueno conocer algunos de los artistas mexicanos contemporáneos que laboren en la escena de la música ambiental/electrónica”, concluye.