Trabajo de Ana María López Jaramillo sobre el periodo de 1952 a 1959
Analiza universitaria la iconografía sobre Fidel Castro
En ese marco, Jesús Gerardo Torres Salcido, director del CIALC, anunció también la reactivación de la Cátedra José Martí de la UNAM, adscrita a dicho Centro
La fotografía requiere tratarse con el rigor de un documento escrito, hay que consultar sus fuentes originales, porque como tal, es un documento, y así hay que abordarla, proporcionar todos sus datos cuando hacemos uso de ésta, como con los textos, aseguró Ana María López Jaramillo, Técnico Académico del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la UNAM.
Al presentar su proyecto Análisis de contenido de la iconografía sobre Fidel Castro (1952-1959), en un libro editado por dicho Centro universitario, López Jaramillo, explicó ante el embajador de Cuba en México, Marcos Rodríguez Costa, que ese trabajo tiene como objetivo identificar la situación que guardan las fotografías de Castro Ruz, tomadas en el periodo de 1952 a 1959, publicadas en libros cuya temática es la insurrección cubana, resguardados en el Centro de Información y Documentación Simón Bolívar del CIALC.
En el Auditorio Leopoldo Zea del piso 3 de la Torre II de Humanidades en Ciudad Universitaria, Enrique Camacho Navarro, investigador del CIALC, quien prologó y codirigió la publicación, expuso que la figura de Fidel Castro, así como la importancia del proceso mismo de la Revolución cubana se mantienen presentes dentro del desarrollo que siguen los Estudios Latinoamericanos como área de investigación en la UNAM.
“Aun con el tiempo transcurrido, desde el 1 de enero de 1959, fecha del triunfo Castrista, y 30 de noviembre de 2016, del fallecimiento del comandante, todavía se pueden encontrar vetas para ampliar los estudios académicos”, refirió.
Magnífico ejercicio académico
En su oportunidad, Marcos Rodríguez Costa indicó que dicho proyecto “es resultado de una seria y profunda investigación, partiendo del análisis de 435 imágenes de Fidel, publicadas en las 43 obras que sirvieron de base y fundamento, que nos entrega una novedosa metodología para el análisis de la imagen, la traducida en fotos, como importante fuente documental para este trabajo”.
Aunque la autora, continuó, plantea que se trata de un estudio exploratorio y descriptivo, propone como resultado una estructura de análisis integradora y de contenido novedoso.
“Pueden estar seguros de que este libro se convierte en un referente para el análisis del periodo histórico seleccionado y una herramienta de trabajo de extraordinario valor para los estudiosos de la Revolución cubana. Un magnífico ejercicio académico”, destacó.
Finalmente, le sugirió lo siguiente a la autora e integrante del CIALC: “Que para empeños mejores viaje a Cuba y trabaje en los fondos de la Oficina de Asuntos Históricos del Consejo de Estado y en los del Centro Fidel Castro Ruz; queda abierta la invitación”.
A la presentación del proyecto asistió también Estela Morales Campos, del Instituto de Investigaciones Bibliotecológicas y de la Información.
Programa mundial
En el contexto de dicha actividad, y todavía ante la presencia de la comitiva diplomática de Cuba en México, Jesús Gerardo Torres Salcido, director del CIALC, hizo pública la reactivación de la Cátedra José Martí de la UNAM, adscrita a dicho Centro.
“Se trata ahora de un programa mundial, y buscamos articularnos con el Centro de Estudios Mexicanos de la UNAM, en Cuba, con sede en la Universidad de La Habana, porque resulta de altísimo interés la relación con dicha nación centroamericana, que, como se ha señalado, forma parte de nuestro punto de llegada y retorno”, señaló.
Antes, se proyectó un video donde Héctor Hernández Pardo, coordinador del Proyecto José Martí de Solidaridad Internacional y subdirector general de la Oficina del Programa Martiano, saludó la reactivación de la mencionada cátedra en México, la cual fue la primera creada en nuestro país en 1993.