Alex Padilla, refuerzo en el arco de Pumas

“Cada fin de semana daré lo mejor de mí”

Proveniente del Athletic de Bilbao de La Liga de España, los colores azul y oro estuvieron presentes desde sus inicios en el futbol; es un equipo al que siempre estuvo ligado

Alex Padilla llegó a casa. Aunque creció a miles de kilómetros de México, en Zarautz, Guipúzcoa, España, el guardameta felino lleva impregnado en el cuerpo el orgullo de ser mexicano que le transmitió su madre desde niño y por el que ahora decidió emprender una nueva aventura en su carrera profesional: portar la playera de Pumas.

Los colores azul y oro estuvieron presentes desde sus inicios en el futbol. Es un equipo al que siempre estuvo ligado. En 2011 posó con la playera universitaria mientras militaba en un equipo infantil del pueblo donde nació. Ahora, 14 años después, vuelve a portar esos colores como futbolista profesional y con la expectativa de convertirse en referente del club y la selección mexicana.

“Desde pequeñito siempre he seguido a este equipo, y ahora mismo que tengo el privilegio de poder defender su portería estoy más que orgulloso de eso. Buscando oportunidades, la mejor opción, sin duda, es cuando me llega la posibilidad de defender la portería de Pumas. Desde muy pequeño he sentido al equipo, entonces se me hizo muy fácil decantarme por este gran club”, afirmó el guardameta de 21 años.

Proveniente del Athletic de Bilbao de la Liga de España, Padilla arribó a Pumas con la misión de crecer como profesional y como persona. Conoce la exigencia de representar a una institución histórica, de jerarquía en México y la afronta con valentía, respeto, disciplina y responsabilidad.

“Obviamente, la presión existe, pero según como la gestiones en tu interior será beneficiosa o errónea la utilidad de esa presión. Intento olvidar todo lo que no me pertenece, todo lo que no puedo controlar. Me ocupo de hacer mi trabajo, de estar al cien cada fin de semana y rendir”.

Siempre se enfoca en el día con día. “Al final el trabajo diario, la disciplina, es lo que me ha hecho hoy estar sentado aquí. Sin olvidar un poco todo lo que he hecho, debo seguir en la misma línea”, afirmó.

El arquero universitario debutó profesionalmente en la Liga española durante la presente temporada 2024-25 con el primer equipo del Athletic de Bilbao, club en el que se formó en las categorías inferiores desde 2019.

“Todo viene porque cuando viví en Estados Unidos durante casi dos años, practiqué mucho baloncesto y, al final, los deportes con la mano se me terminan dando muy bien”.

Foto: Club Universidad Nacional.

En 2024 Padilla fue convocado con la selección mexicana mayor para los duelos de preparación en la fecha FIFA de agosto de ese año. También ha disputado dos encuentros con la selección mexicana sub-23. Además, tuvo un proceso con la selección de España Sub-19, donde jugó en seis encuentros.

“Portar la playera de la selección, para mí, lo es todo. Como mexicano y como toda mi familia mexicana, me llena de orgullo defender los colores de mi país, intentar llevarlo a lo más alto. Ahora, me toca pensar en el día a día y si llegan estas cosas, qué mejor. Teniendo la repercusión que tiene este histórico club y haciendo las cosas bien, bueno, te puedes acercar un poquito más a un llamado”.

Pese a que aún no ha tenido minutos en la Liga MX, Padilla es consciente de que la oportunidad pronto llegará. No pierde el enfoque, es parte de su personalidad, de esa pasión que intenta contagiar a sus compañeros dentro y fuera de la cancha. Evidencia su liderazgo desde la banca, se involucra en cada jugada, grita, observa, aplaude cada esfuerzo del equipo.

“Fuera de la cancha soy tranquilo, muy observador, me gusta tener todo bajo control. Dentro del campo lo vivo mucho, soy muy pasional, intento tener al equipo enchufado, así yo también me mantengo en el partido. Obviamente, intentando dar lo mejor de mí en todo momento”.

Le gusta aportar mucha dedicación, trabajo diario, “y si puedo ayudar con paradas, con entendimiento con los defensas, con el delantero, pues todo sumará. Sé que todo eso tiene que ser desde la base del trabajo diario y un buen grupo”.

Alex Padilla está en casa, lleno de orgullo, compromiso, disciplina. Porta con pundonor la playera auriazul, la misma que lo acompañó en sus inicios como portero, puesto en el que comenzó en este deporte por recomendación de sus amigos y cuya perseverancia lo llevó a debutar en una de las mejores ligas del mundo y, ahora, ser una pieza en el plantel de Gustavo Lema, en la búsqueda por el octavo título del Club Universidad Nacional.

“El objetivo es estar día con día al máximo nivel. Cada fin de semana daré lo mejor de mí, a veces me saldrá muy bien, otras no tanto, pero, bueno, siempre voy a intentar dar lo máximo”, concluyó.

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