El ejercicio académico captó a mil 653 estudiantes
Concluye con éxito Macroentrenamiento en Inteligencia Artificial
La UNAM participó en la organización junto con la Red de Macrouniversidades de América Latina y el Caribe
La inteligencia artificial (IA) afecta todos los ámbitos de nuestra convivencia, las relaciones sociales, los sectores económicos, la forma en que se toman decisiones, la gestión de riesgos, y tendrá impacto en el mundo laboral, financiero, de la salud, etcétera, afirmó el rector Enrique Graue Wiechers.
La IA está ya presente en todos los espacios, y además hay una explosión de su uso, añadió al clausurar el Macroentrenamiento en Inteligencia Artificial (MeIA) 2023, encabezado por la Universidad Nacional.
Ejemplo de ello es que ChatGPT alcanzó en dos meses a más de 100 millones de usuarios. La IA crece a una velocidad impresionante y la Red de Macrouniversidades de América Latina y el Caribe (también convocante del curso) “no podía quedarse atrás”, dijo.
Por supuesto, el impacto de la IA en la educación es muy importante. En este caso, más de 1,200 estudiantes provenientes de 82 universidades y 12 países estuvieron apegados a las sesiones del MeIA, que tuvo una duración de tres semanas.
Se abrió un reto que deberá continuarse. “Espero que esto no concluya aquí; la gran red que se ha establecido debe continuar en beneficio de nuestros docentes y estudiantes, y del desarrollo de nuestros países”, abundó el también presidente de la Red.
Finalmente, el rector Graue agradeció y felicitó el esfuerzo realizado no sólo por el equipo de la UNAM, sino también de todos los participantes en su conjunto, para la obtención de este gran logro.
En la ceremonia a distancia, Héctor Benítez Pérez, director general de Cómputo y de Tecnologías de Información y Comunicación, y presidente del Comité Académico del MeIA 2023, recordó que en 2022, junto con la Universidad Nacional de Colombia, “comenzamos a soñar juntos el macroentrenamiento, iniciativa que emprendimos con el apoyo de la Universidad Nacional de Asunción, Paraguay, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, y la Universidad Veracruzana, con las que firmamos el convenio de colaboración que permitió la creación de un comité académico de especialistas dedicados al diseño del taller”.
Los 39 talleristas seleccionados, junto con sus equipos, formaron un ejército de más de 56 personas. En tanto, los alumnos que llegaron a la meta y concluyeron las tres semanas de trabajo intenso del MeIA provinieron de Colombia, México, Perú, Argentina, Paraguay, Bolivia, Venezuela, Guatemala, Brasil, Ecuador, Costa Rica y El Salvador.
El macroentrenamiento, detalló, fue único en su tipo, ya que captó a 1,653 estudiantes provenientes de diversas áreas de conocimiento, tanto de licenciatura, especialización y posgrado; de ellos, 1,254 fueron constantes y se mantuvieron las tres semanas de trabajo.
En tal lapso, los alumnos asistieron a las clases virtuales por medio de una plataforma novedosa conocida como MACTI, adecuada por la UNAM. “Estuvieron en contacto con profesores y compañeros, pudieron acceder a los materiales de apoyo y ejecutaron directamente sus prácticas y ejercicios matemáticos de programación”.
Benítez Pérez explicó que el taller contó con tres módulos; en el primero se abordaron los temas de cálculo, algebra lineal y estadística; introducción a la IA (aprendizaje automático y redes neuronales artificiales) y una introducción de programación en lenguaje Phyton.
En la segunda semana se trató la clasificación automática de textos, programación genética, reconocimiento de imágenes, visión computacional, redes neuronales convulcionales y machine learning. Finalmente, en la semana de cierre se llevaron a cabo seis retos para entender que la IA bien empleada ayuda a atender problemas como detección de anomalías en grandes conjuntos de datos, identificación automática de denuncias de delitos en mensajes de Twitter en español, o la clasificación de especies a partir de secuencias de ADN.
Los retos recibieron propuestas de solución y se identificaron las mejores respuestas. “Esto abre la posibilidad de tender lazos para que los investigadores y estudiantes busquen, más adelante, colaboraciones de intercambio y movilidad”, consideró el director.
Dolly Montoya Castaño, rectora de la Universidad Nacional de Colombia, mencionó que “en el centro de toda nuestra actividad como macrouniversidades y como instituciones de educación superior de América Latina, están los jóvenes. Por eso nos aliamos con la UNAM, que ha puesto a disposición la infraestructura para poder hacer este curso maravilloso”, y con otras instituciones.
La IA está presente y no hay que tenerle miedo, sino darle calidad y ver cómo se emplea: debe ser una herramienta para crecer como seres humanos. Ahora podría haber una reunión de filósofos y otros pensadores de las universidades, para reflexionar en cómo las nuevas tecnologías repercuten en nuestra vida.
En la conferencia magistral de clausura, Daniel Burgos, vicerrector de Proyectos Internacionales de la Universidad Internacional de la Rioja, y consultor de la Comisión Europea y de la ONU, expuso que la ciencia abierta y la tecnología artificial resultan claves para apoyar la educación de manera efectiva, e incluso, inevitable.