Estudio de académica del Colegio de Geografía de la UNAM

Crece turistificación en áreas del corredor Playa del Carmen-Tulum

Tras un proceso de urbanización, bienes naturales (playas, lagunas, cenotes, selvas) han sido mercantilizados por intereses inmobiliarios y turísticos; además, se provocó precarización habitacional en pueblos del poniente de la carretera costera

Imagen: cortesía Patricia Eugenia Olivera.
El paraíso se está configurando en ciudades. Según una investigación de Patricia Eugenia Olivera Martínez, académica del Colegio de Geografía de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) de la UNAM, el corredor Playa del Carmen-Tulum, en Quintana Roo, vive un proceso de turistificación urbana, el cual consiste en centrarse sólo en actividades que proporcionan servicios turísticos dedicados a incrementar el consumo.

Este proceso, describió la especialista en urbanismo y gentrificación, se caracteriza por desaparecer actividades propias en las ciudades, así como áreas de vivienda para trabajadores de clases medias, por ofertas de alquiler a cargo de plataformas digitales.

“Hay un desplazamiento forzoso de los residentes originales, un incremento en el mercado de suelo para expats (abreviatura de expatriado, que significa “fuera de su país de origen”), así como de nómadas digitales, pensionados y viajeros”, añadió.

En relación con la población residente, de acuerdo con cifras presentadas por la experta, el 99.68 % de los habitantes de Cancún están dedicados al turismo; en Puerto Morelos el 97.44 %; Playa del Carmen el 98.76 %; así como Cozumel el 95.37 % y Tulum el 75.15 %.

Modificaciones

Al participar de manera remota en el seminario Procesos socio-territoriales y urbano-ambientales en el Sureste mexicano, convocado por el Centro Peninsular en Humanidades y Ciencias Sociales (CEPHCIS) de la Universidad Nacional, Olivera Martínez manifestó que los bienes naturales que antes eran gratis con el proceso de urbanización han sido mercantilizados por intereses inmobiliarios y turísticos.

De esta manera, continuó, los bienes naturales y patrimoniales se convirtieron en activos, como playas, lagunas, cenotes, selvas, e incluso hay un desgaste del patrimonio arqueológico de ciudades mayas.

“En la costa de Quintana Roo la circulación de capitales hacia la turistificación en la península se extiende a lo largo de los 330 kilómetros que separan a Cancún de Chetumal incluidas dos islas: Mujeres y Cozumel, y generan un proceso de conurbación desde Cancún-Playa del Carmen-Tulum, desarrollo de proyectos turísticos hoteleros en toda la costa extendiéndose hacia Bacalar”, precisó.

Paralelamente a lo anterior, dijo, se encuentra la precarización habitacional en los pueblos ubicados en el poniente de la carretera costera con altas carencias para la población trabajadora.

Para el caso de toda la península de Yucatán ha generado profundos cambios en la ocupación y urbanización que han trasformado perfiles sociales, culturales y ambientales desde hace seis décadas.

Migración

La doctora en Geografía por la UNAM destacó que los mencionados factores han generado en la zona una superficie urbanizada muy elevada, con altas tasas de crecimiento de migración internacional y, en consecuencia, segregación espacial.

“En cuanto a los residentes en Quintana Roo nacidos en otra entidad del país y en el extranjero hasta 2020, estas son las cifras: a la cabeza está Yucatán con 237,845 personas; Tabasco con 143,685; Veracruz con 127,919; Chiapas 116,657; y en quinto sitio Ciudad de México con 100,388. De otros países se contabilizaron 33,705”.

También podría gustarte