México es un enfermo que se agrava y se dirige hacia la descomposición, diagnosticó Juan Ramón de la Fuente. Si seguimos así, no creo que sobrevenga una hecatombe, pero se agudizarán la violencia, la drogadicción, los suicidios, la desintegración del tejido social y la inconformidad, advirtió el exrector de la UNAM.
Con ese símil clínico presentó una serie de ensayos en los que profundiza con un agudo análisis sobre varios de los síntomas que aquejan a la nación, reunidos en su libro La sociedad dolida, el malestar ciudadano.
Con prólogo de Elena Poniatowska y editado por Grijalbo, el texto fue presentado en la 39 edición de la Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, durante una charla entre el autor y Carmen Aristegui, quien fungió como entrevistadora.
En el evento, celebrado en un colmado Salón de Actos, participaron también Adriana Malvido, quien leyó el prólogo de Poniatowska (la cual intervino mediante un video) y el editor, Juan Carlos Ortega.
Dolencias sociales
De la Fuente hace un análisis fresco y clínico, porque entiende lo que ocurre cuando entra al cuerpo un desequilibrio. “Como sociedad tenemos un dolor que no hemos podido superar, vivimos con miedo, sin aclarar momentos traumáticos como Ayotzinapa, donde aún no sabemos lo que pasó con 43 estudiantes. Saber la verdad es fundamental para procesar los problemas, la verdad libera”, afirmó.
Entre las dolencias de un país enfermo, mencionó el incremento de la ansiedad y la depresión, del alcoholismo y las drogas que, aseguró, no son elementos inconexos.
Asimismo, consideró que la globalización es injusta porque aumenta las disparidades. En ella estamos más interconectados que nunca, pero también más solos.
Finalmente, De la Fuente destacó que si no hacemos algo como sociedad, el desencanto se generalizará, la gente estará más enojada y habrá un proceso de deterioro.