Avanzan si no se tratan o previenen: Nadia Yael Morales
Desde el nacimiento puede haber problemas visuales
Por lo anterior, es muy importante que acudan a una revisión temprana aquellos infantes que poseen antecedentes familiares relacionados con errores refractivos, cataratas, glaucoma o si nacieron de manera prematura
Comúnmente se cree que los infantes no pueden ser evaluados de su salud visual, especialmente cuando aún no han adquirido el lenguaje.
Nadia Yael Morales Rodríguez, académica de la Facultad de Estudios Superiores (FES) Iztacala, menciona: “Todos los problemas visuales pueden estar presentes y comienzan a avanzar desde el nacimiento, sobre todo si no se tratan o previenen”.
La recomendación es acudir a revisiones anuales desde el mes de nacimiento en la que se evalúan la agudeza visual y probables errores refractivos con métodos adaptados de acuerdo con su edad, nivel de atención y capacidad de cooperación, señala.
Agrega que es muy importante que acudan a una revisión temprana aquellos infantes que poseen antecedentes familiares relacionados a errores refractivos, cataratas, glaucoma o si nacieron de manera prematura.
“La revisión tiene que hacerse año con año, por lo menos antes de entrar al preescolar, donde los niños van a tener sus primeros acercamientos con el proceso de aprendizaje significativo”. Debe realizarse con un optometrista, quienes “saben que se tiene que utilizar otro tipo de métodos en el que no es necesario que conozcan el alfabeto o saber leer”, recuerda la universitaria.
El licenciado en Optometría, añade, “está capacitado con las herramientas y conocimiento suficientes para identificar y corregir los errores refractivos del paciente, identificar si necesita terapia visual o en su defecto requiere de otra atención como la oftálmica”.
Otras medidas preventivas, acota, son limitar el uso de pantallas, especialmente teléfonos inteligentes o consolas de juego portátiles y aumentar la exposición a exteriores y la luz natural. “Actualmente, los infantes son más propensos a tener miopía, y aunque puede haber problemas refractivos desde el nacimiento, el ojo humano adquiere un punto máximo de desarrollo entre los 4 y 6 años”.
Ninguna de las pruebas hechas por los optometristas es dolorosa. Nadia Yael Morales invita a madres, padres y tutores a acudir a la Clínica de Optometría en la FES Iztacala, donde estudiantes, egresados y académicos brindan su atención a pacientes pediátricos.
Es aconsejable, indica, que “lleven a los niños a valoración cuando ya hayan comido y no sea su hora de sueño y se presenten con un juguete de apego”. Estos tres puntos facilitan la consulta, ayudan a que no sea estresante para los pequeños.
La Clínica de Optometría ofrece sus servicios desde las 7 de la mañana hasta las 7 de la noche, de tal manera que los padres puedan planear el mejor horario para acudir a una cita, misma que puede ser agendada al número 55 56 23 13 46.
Para más información visita: https://optometria.iztacala.unam.mx/clinica-de-optometria/