José Ángel Romero compitió en el Clásico Mr. México
Destaca alumno de Ciencias en nacional de fisicoconstructivismo
Con apenas dos años de práctica en esta disciplina, nota una diferencia mínima respecto a los primeros lugares
A sus 20 años de edad y en apenas su segundo año practicando de manera formal el fisicoconstructivismo, José Ángel Romero González, alumno de la Facultad de Ciencias, compitió en la edición 69 del Clásico Mr. México, máximo evento nacional de su disciplina. Para su carrera deportiva es una experiencia invaluable que además le deja como principal diagnóstico que la distancia con respecto a los mejores competidores de todo el país no es significativa.
“Cuando empecé a entrenar veía muy lejos poder llegar a un evento así, pero afortunadamente ahora el resultado se ha dado y logramos presentar un buen físico. Subir y ver que la diferencia fue mínima con los primeros lugares, y que físicamente estoy al nivel de los mejores del país, me llena de mucha satisfacción. Para haber sido el primer Mr. México fue un buen resultado”, manifestó el fisicoculturista puma tras el evento en el cual culminó en el lugar 14 de la categoría Men’s Physique Juvenil hasta 175 cm.
“Junto con mis coaches decidimos competir en esta categoría, donde sólo se evalúa el físico de la cintura para arriba. Al ser mi primer Mr. México consideramos que era lo más conveniente. Sabíamos que era un riesgo porque no estoy acostumbrado a realizar estas poses, pero decidimos este cambio. Fue un mes de practicar, de ajustar todos los detalles y siempre estuve seguro de conseguir un buen resultado, haciendo todo lo que conlleva: entrenar, descansar y seguir una dieta elaborada por especialistas”, añadió Romero González, quien fue apoyado por la Asociación de Fisicoconstructivismo de la UNAM.
Mejoras
Asimismo, el atleta auriazul destacó los beneficios que le ha otorgado la práctica. “El deporte me ha dejado mucha mejor salud. Llevar una buena alimentación, un buen descanso y un buen entrenamiento, genera una buena salud, más allá del resultado en la tarima. He sentido una mejora en el desempeño al estudiar, mi concentración es mucho mejor, descanso mejor, tengo mayor agilidad para dar solución a los problemas, me ha dado esa capacidad de organizarme en lo académico, en lo deportivo y de manera personal”.
Luego de un año significativo para su desarrollo atlético, en el que compitió en al menos cinco eventos, el alumno de la Facultad de Ciencias tomará un descanso activo con la ambiciosa meta de convertirse lo más pronto posible en competidor internacional.
“Haré una pausa, pero sigo entrenando y haciendo dieta para lograr mayor desarrollo físico, crecer y lograr mejores resultados, siempre enfocado en conseguir una tarjeta profesional, que te avala mundialmente como fisicoculturista. Con ella se puede competir en los eventos más grandes de todo el orbe. Creo tener una mente fuerte, concentrada, muy determinada y, sobre todo, consciente de qué físico voy a presentar a cada evento y qué resultados estoy logrando”, sentenció.