El gol, esa inyección de felicidad…

Nada se compara con anotar un gol. Esa inyección de felicidad que te impulsa a gritar, saltar, bailar. Una anotación lo cambia todo, acerca la gloria, otorga títulos, reconocimiento, orgullo. Keylla Sherlyn Alvarado lo sabe: con sus tantos llevó a la categoría sub-18 a obtener su primer título en este Apertura 2022.

La delantera juvenil fue clave en la liguilla. Anotó el tanto con el que el equipo auriazul derrotó al líder Chivas, su doblete ante Necaxa otorgó el pase a la final y, en el Estadio Olímpico Universitario, abrió el marcador con el que Pumas venció 4-0 al América en el primer partido por el título.

“Anotar gol en liguilla es lo mejor, representa el sacrificio que estuve haciendo durante un tiempo. Los entrenamientos han sido difíciles. Hay días buenos y días malos, pero que te estén dando resultados es una sensación grandiosa. Sé que todo lo que he trabajado me rindió frutos.”

Esos goles fueron especiales por la rivalidad con América y Chivas. “Pasaron muchas cosas. Quieres callar a las personas, y qué mejor manera que anotar un gol en su casa y después en la mía”, afirmó la jugadora universitaria.

No todo fue felicidad para Sherlyn. Una lesión la apagó justo en el momento más importante, cuando estaba más cerca de conseguir su objetivo. La atacante de 18 años tuvo que salir de cambio al minuto 51 de la final de ida por una dolencia en la rodilla. Sabía que era grave, el dolor era intenso. Así fue, los estudios reflejaron un esguince en el ligamento colateral de la rodilla derecha. La final de vuelta estaba perdida para ella.

Tuvimos la fortaleza de nunca dejarnos solas, no dejar caer a nuestra compañera”

“Creo que mi lesión fue el momento más complicado que he vivido hasta ahora. Es algo que me ha costado mucho, me detuvo. Me ha lastimado tanto en diferentes aspectos. Mi mundo se derrumbó. Yo quería jugar, vivir ese momento completo, no sólo una parte. Tuve la confianza de que mi equipo lo lograrría, que iba a sacar el campeonato, que no se dejaría caer. Conozco las cualidades que tienen cada una de mis compañeras y no tuve miedo, sabía que lo iban a lograr y lo hicieron.”

Siempre quiso jugar en el Azteca, y estar ahí, y no hacerlo la llevó a sentirse mal, “pero me empecé a mentalizar de que, tal vez, vendrán cosas mejores, que después quizá debute en el Azteca en primera división”, comentó.

Pese al dolor, Sherlyn y sus compañeras levantaron el título. Nada le borró la sonrisa. En ese momento, la alegría bloqueó el dolor, la tristeza. Se olvidó de las muletas y festejó junto a su equipo, el que se apoyó en las buenas y las malas, el que mostró una unión inigualable para coronarse.

“El torneo fue algo difícil porque hubo altibajos, pero supimos salir adelante. Tuvimos la fortaleza de nunca dejarnos solas, no dejar caer a nuestra compañera, y en cada momento, aunque las cosas iban mal o muy bien, no nos dejamos caer. Todo el equipo se esforzó, puso de su parte para poder ser campeonas.”

La unión fue clave para el título, “tanto del cuerpo técnico como nosotras que pusimos de nuestra parte. Cuando te caías, estaba tu compañera para levantarte. Teníamos ese impulso de salir y sacar la garra, darlo todo por el equipo”, recordó.

Sher sumó mil 70 minutos en 18 partidos jugados del torneo Apertura 2022, y convirtió nueve goles, registro con el que superó las seis anotaciones con la sub-17 en el Clausura 2022. Su carrera va en ascenso. Sabe que nada ni nadie la detendrá para conseguir el siguiente objetivo: debutar en primera división.

“Mi objetivo era ser campeona. Es algo que he trabajado bastante, que anhelaba tener, lograr algo y que las demás niñas vean que querer es poder, y que se den cuenta que si tú quieres, lo puedes lograr. Todo lo que has vivido, lo que has sacrificado y que rinda frutos es de lo mejor.”

Sólo resta seguir adelante. “Sé que vienen cosas mejores: voy a llegar a primera división, a arrasar con todo y dar lo mejor de mí para poder lograrlo”, afirmó Alvarado, con la misma sonrisa e ilusión con la que conduce el balón para anotar un gol en cada partido.