El hogar, espacio público, sin límites

El hogar ya no es lugar de refugio y descanso del ajetreo diario en los centros laborales y educativos; la pandemia lo ha convertido en espacio público, oficina y escuela, donde los límites y jerarquías se han diluido, generando estrés al interior de la familia, afirmó Jesús Felipe Uribe Prado, investigador del Posgrado de la Facultad de Psicología.

Así, han surgido debates sobre qué labores son más importantes: las del niño en educación básica, las del universitario, las del trabajo del papá o de la mamá, cuando todas deberían tener la misma relevancia, dijo.

Los límites también se han visto afectados, y la gente se pregunta “hasta dónde mostrar la casa o hasta qué momento el perro tiene derecho a ladrar, porque está en proceso una videoconferencia o videollamada”.

Al participar en el programa La UNAM responde, Uribe Prado subrayó que con el trabajo en casa (homeoffice) se enfrentan retos como la ciberseguridad. Pero, ¿de quién depende la seguridad de la información?, ¿de mi empresa o de mi hogar?, “eso se vuelve un problema porque el empleado podría manejar información confidencial desde casa, que podría ser escuchada por cualquier persona y representar un conflicto de intereses”.

Estrategias para reducir el estrés

Desde la década de 1980, la Organización Mundial de la Salud y las secretarías del Trabajo y de Salud definieron que un trabajador puede enfermar por razones físicas (accidente), químicas, al estar expuesto a un compuesto biológico (virus) o a factores psicosociales.

Entonces no existía la Covid-19, “pero hoy aplica”. En 2018 se introdujo el concepto de factores de riesgo psicosocial en la Norma 035, que incluye el ambiente laboral, “y ahora la pandemia lo ha venido a colocar como parte de éste”.

Para enfrentar esta situación, el experto consideró indispensable estar conscientes del peligro de esta enfermedad, de los cuidados que debemos tener y valorar más la salud, la alimentación y el ejercicio.