Abordará problemas en energía y medio ambiente
El Instituto de Ciencias Nucleares estrena laboratorio
Está dedicado al estudio de la Química de Materiales y Organización Supramolecular

Con el objetivo de realizar investigaciones que ofrezcan soluciones innovadoras a problemas complejos que enfrenta nuestra sociedad, como la energía sostenible y la medicina personalizada, entre otras, se inauguró el Laboratorio de Química de Materiales y Organización Supramolecular (LQMOS) en el Instituto de Ciencias Nucleares (ICN).
Este nuevo laboratorio, ubicado en la planta baja del edificio E, estará a cargo de Rafael Omar Arcos Ramos, investigador titular del ICN y miembro nivel I del Sistema Nacional de Investigadoras e Investigadores, especialista en química de materiales inteligentes nanoestructurados.
Durante la ceremonia de inauguración, Alfred U’Ren, director del ICN, señaló: “Hoy abrimos las puertas a nuevas ideas, a nuevos descubrimientos y a un futuro lleno de posibilidades”, ya que este laboratorio representa mucho más que infraestructura. “Es una apuesta por la ciencia de frontera, por la investigación que transforma e impacta de manera directa en nuestra vida cotidiana”.
Por su parte, Rafael Omar Arcos Ramos subrayó que este laboratorio contribuirá a la investigación y el desarrollo de nuevos materiales (supra)moleculares, con los que será posible abordar problemas en áreas como: energía, con la creación de materiales para aplicaciones de electrónica orgánica, baterías y almacenamiento de energía; medio ambiente con materiales para captura y conversión de contaminantes; biomedicina, materiales para reconocimiento y marcaje celular, así como para la posible liberación controlada de fármacos; tecnología a través de materiales avanzados para electrónica, fotónica y nanotecnología.
También se realizará la organización y el autoensamble supramolecular, que es el estudio de las interacciones no covalentes como fuerza motriz para la formación de estructuras (supra)moleculares complejas, abarcando desde la nanoescala hasta la generación de materiales macroscópicos con funcionalidades emergentes; es decir, propiedades que no están presentes en las moléculas individuales, sino que surgen de su organización colectiva. Algunos ejemplos de materiales a desarrollar son: conductividad eléctrica mejorada, capacidad de autorreparación, así como su respuesta a estímulos externos.
Asimismo, se trabajará en la caracterización exhaustiva de materiales, a través de aplicación de técnicas instrumentales de vanguardia para la determinación de la estructura, propiedades y comportamiento de los materiales sintetizados, considerando tanto su dimensión molecular como macroscópica.
“La apertura de este nuevo espacio buscará demostrar que la química de materiales y la organización supramolecular desempeñan un rol crucial en el avance de nuevas tecnologías disruptivas. Estas disciplinas poseen el potencial de generar transformaciones significativas en sectores clave como la energía, la medicina, la electrónica y la protección del medio ambiente”.
Además de la investigación de frontera que aquí se realizará, este nuevo laboratorio servirá para formar a más estudiantes de licenciatura y posgrado en ciencias químicas. En este sentido, Alfred U’Ren indicó “este laboratorio es una inversión en las personas. En las nuevas generaciones de científicas y científicos. En las colaboraciones que se tejerán entre distintas disciplinas, trabajando juntos para enfrentar los grandes desafíos de nuestro tiempo”.