Enfermedades sistémicas pueden tener su origen en problemas bucodentales

En la actualidad, se reconoce que la salud bucodental está estrechamente vinculada con la salud sistémica. De hecho, diversas enfermedades sistémicas, como la endocarditis bacteriana subaguda que afecta al corazón, tendrían su origen en problemas bucodentales, alertó el director de la Facultad de Odontología (FO) de la UNAM, Francisco Javier Marichi Rodríguez.

Aunque es poco común dicho padecimiento, puede ser mortal en personas con antecedentes cardiacos, especialmente si tienen un marcapasos o una válvula artificial. Además, puede dañar los pulmones, causando problemas severos que, en ocasiones, pueden tener consecuencias fatales, afirmó.

A su vez, la secretaria auxiliar de la dirección de la FO, Miriam Ortega Maldonado, dijo que la prevención es la llave de una adecuada salud bucodental, destacando la importancia de cuidar no sólo los dientes, sino también las estructuras bucales adicionales.

Es relevante que todos, sin importar la edad, cepillen y autoexploren la lengua, las mucosas, los dientes y el paladar frente a un espejo, especialmente antes de dormir. Esto debe incluir el uso de auxiliares, como el hilo dental, para los espacios interdentales y el cepillo para el aseo del paladar, destacó.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las enfermedades bucodentales afectan a unos 3 mil 500 millones de personas, y aunque la mayoría son prevenibles, representan una carga significativa para la salud pública. Estas afecciones causan dolor, molestias, deformidades y, en casos extremos, la muerte, afectando a las personas a lo largo de toda su vida.

El organismo señala que, según el estudio sobre la carga mundial de morbilidad de 2021, la caries dental no tratada en dientes permanentes es el trastorno más frecuente.

Los males bucodentales –cuyo tratamiento es costoso y suele estar excluido de la cobertura sanitaria universal– son el resultado de diversos factores de riesgo modificables que también están asociados con muchos padecimientos no transmisibles, como el consumo excesivo de azúcar, el tabaquismo, el consumo de alcohol y una higiene bucal inadecuada, precisa.

Con motivo del Día Mundial de la Salud Bucodental, que se conmemora hoy 20 de marzo, el universitario indicó que los padecimientos de las encías también son importantes, y se corre el peligro de que los dientes pierdan el tejido de soporte, se empiezan a mover y acaban cayéndose, sin que el paciente haya sentido molestia. A diferencia de las caries son, en su mayoría, silenciosos y con la posibilidad de atacar al hueso.

Apoyo a la sociedad

La OMS, refirió Francisco Javier Marichi, establece parámetros para mejorar la salud bucodental hacia el año 2030 y está desarrollando estrategias en las que participa la UNAM, ya que la FO preside la Organización de Facultades, Escuelas, Departamentos e Institutos de Odontología de las Universidades de América Latina y del Caribe.

“Tratamos de que los estudiantes vayan a comunidades susceptibles, que necesitan apoyo”. Los pacientes beneficiados reciben atención bucodental, y los jóvenes se sensibilizan ante las necesidades de la población, explicó.

Además, dan asistencia en las nueve clínicas periféricas de la Facultad, donde ofrecen servicios a la población que más los necesita. Y se suma a estas acciones la reciente creación de la Sociedad de Exalumnos de la Facultad de Odontología, que diseñará campañas de apoyo para las comunidades más vulnerables.

El Día Mundial de la Salud Bucodental 2025 se lanzó oficialmente en septiembre pasado. Este es el segundo año de la campaña 2024-2026 “Una boca feliz es…”, cuyo objetivo es inspirar un cambio duradero y positivo educando a las personas sobre el papel crucial que desempeña una boca sana en nuestras vidas. El lema de este año es “Una boca feliz es una mente feliz”.