Comparten investigaciones interdisciplinarias
Forman 42 instalaciones una red universitaria de laboratorios de suelos
El objetivo es generar nuevos datos científicos capaces de incidir en las políticas públicas dirigidas a la mitigación y la conservación de este recurso
El suelo es un recurso natural indispensable para los ecosistemas terrestres y el bienestar humano. Actualmente atraviesa por una crisis debido a la falta de cuidado; el problema es global y se calcula que a nivel mundial alrededor de 30 por ciento del suelo se ha degradado, mientras en México es más de la mitad del territorio nacional, aseveró Blanca Lucía Prado Pano, titular del Programa Universitario de Estudios Interdisciplinarios del Suelo (PUEIS).
Dependiente de la Coordinación de la Investigación Científica, el PUEIS busca reunir información novedosa en torno a la ciencia del suelo que se genera en distintas entidades de la UNAM para producir nuevos datos científicos, capaces de incidir en las políticas públicas dirigidas a la mitigación y la conservación de este esencial recurso, explicó.
Prado Pano, también investigadora del Instituto de Geología, dijo que el suelo es importante “por todo lo que representa para nosotros: gracias a él tenemos alimento, agua limpia por su regulación tanto del ciclo hidrológico como de la temperatura, mejoramiento de la calidad de aire, así como mitigación de gases de efecto invernadero”.
El suelo soporta una cuarta parte de la biodiversidad del planeta, y en él se originan funciones y servicios ambientales, “pero como no los conocemos no lo cuidamos”, comentó.
Concentrar esfuerzos
Una de las principales tareas del PUEIS es concentrar los diferentes esfuerzos de los estudiosos del suelo en la UNAM en una Red Universitaria de Laboratorios de Suelos (RULabS), iniciativa actualmente en marcha.
Thalita Fernanda Abbruzzini, coordinadora de la red e integrante del PUEIS, explicó que primero se hizo una base de datos para identificar todos los laboratorios que existen en la UNAM que tienen el suelo como objeto de estudio. Se creó un registro y una campaña para formar parte de la red.
“Con el objetivo de compartir investigaciones interdisciplinarias dentro de la institución, pudimos registrar 42 laboratorios que ya forman parte de la red, al igual que de 20 entidades de la UNAM.
Los laboratorios están repartidos 25 en Ciudad Universitaria, seis en Querétaro, cuatro en Michoacán, dos en Yucatán, dos en Sonora, uno en el Estado de México, uno en Guanajuato y otro en la Facultad de Estudios Superiores (FES) Zaragoza.
Estos sitios forman parte de dos centros de investigación, dos ENES, cuatro facultades, ocho institutos de investigación, una unidad multidisciplinaria y una estación regional.
Hasta ahora, el trabajo de los laboratorios se concentra en 14 áreas temáticas: ambiental, biogeoquímica, biología, experimental, fijación y migración de radioisótopos, génesis de suelos, geoquímica, interacción entre humanos y ecosistemas, mecánica, química, microscopía, paleosuelos, resistencia antimicrobiana y reconstrucción procesamiento y análisis de imágenes.
“Es importante que la capacidad analítica e instrumental que tiene la UNAM se conozca dentro y fuera de la comunidad universitaria, porque con ella mejoramos la enseñanza de la ciencia del suelo, apoyamos proyectos de investigación específicos y promovemos que los laboratorios de la red colaboremos para entender las grandes problemáticas de este recurso”, agregó Abbruzzini.
A través de la red se compartirán técnicas y datos que ayuden a comprender lo que hoy se desconoce, como el estado de salud de los suelos y el porcentaje preciso de aquéllos degradados en México, por mencionar algunos ejemplos, los cuales serían muy útiles para tomar decisiones y emprender acciones, subrayó.
Además de Prado y Abbruzzini, participan académicos aliados del PUEIS como líderes de este esfuerzo: Águeda Elena Ceniceros Gómez, de la Facultad de Química, y Alberto Prado Farías, de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) Juriquilla. Entre los académicos voluntarios colaboran Lucy Mora Palomino, del Instituto de Geología, así como María del Pilar Fernández Lomelín y Mario Cayetano Salazar, ambos del Instituto de Geografía.
Los principales objetivos de la RULabS consisten en reconocer la gran capacidad analítica de la UNAM en esta materia y promover la colaboración multidisciplinaria e interinstitucional, que resulte en beneficios en capacitación, uso de recursos y generación del conocimiento a través de la participación en proyectos de investigación y educación.