Agiliza también la disposición a la ciencia abierta

Fortalece la inteligencia artificial generativa la gestión de datos

Las bibliotecas, como facilitadoras del acceso a la información, deben liderar el proceso de innovación tecnológica integrando herramientas de vanguardia: Elsa Margarita Ramírez Leyva

Las bibliotecas, como facilitadoras del acceso a la información, deben liderar el proceso de innovación tecnológica integrando herramientas de vanguardia, como la inteligencia artificial (IA), que fortalezcan su capacidad para gestionar e incidir de una mejor manera en las actividades sustantivas de las universidades e instituciones de educación superior e investigación en el siglo XXI.

Así lo expresó Elsa Margarita Ramírez Leyva, titular de la Dirección General de Bibliotecas y Servicios Digitales de Información (DGBSDI), durante la inauguración de la XXI Conferencia Internacional sobre Bibliotecas Universitarias. Bibliotecas inteligentes: la convergencia de la IA y los datos abiertos en la investigación académica.

Ante especialistas reunidos en el Auditorio Jorge Carpizo de la Coordinación de Humanidades y vía zoom desde Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Estados Unidos y México, la también investigadora precisó que en un mundo cada vez más digitalizado y tecnificado, las tecnologías emergentes potencian significativamente el desarrollo de la investigación científica, la docencia, así como la generación de nuevos conocimientos.

Ramírez Leyva comentó: “Al ser las bibliotecas los espacios que facilitan, sin impedimento alguno, el acceso abierto a las fuentes y los recursos de información, el sector bibliotecario está comprometido a asumir responsabilidades y franquear los desafíos que todo ello representa. Tecnologías como la inteligencia artificial generativa abren un campo de posibilidades para la gestión de datos e información, así como para agilizar el acceso a la ciencia abierta, en la que se genera un universo de datos cada vez más necesario para avanzar en la innovación, contribuir en la solución de problemas y garantizar el progreso de los conocimientos”.

Actualización en todos los sentidos

Por su parte, Francisco Ramírez Suárez, coordinador de Proyectos Tecnológicos y de Innovación de la Secretaría de Desarrollo Institucional de la UNAM, sostuvo que el encuentro es evidencia de la oportunidad coyuntural que se hace presente en las bibliotecas universitarias por actualizarse en todos los sentidos respecto a las tendencias tecnológicas emergentes que hoy por hoy son una realidad.

Desde hace tiempo, reflexionó, las bibliotecas han dejado de ser sólo depositarias del conocimiento, y ahora, con la IA y los datos abiertos se posicionan como nodos activos de procesamiento, análisis y distribución de información en beneficio de la investigación científica y la educación, revolucionando las formas como se organiza, descubre y utiliza la información en las instituciones académicas.

Ramírez Suárez abundó: “Con la incorporación de la IA a las bibliotecas, éstas son capaces de proporcionar servicios de información más eficientes, pues no sólo facilitan nuevos recursos, sino que sugieren nuevas líneas de investigación, colaboraciones y herramientas de análisis, entre otras ventajas. En este contexto el tema adquiere una relevancia especial para la UNAM, pues ha sido históricamente un referente en la producción y gestión del conocimiento en América Latina, y sus bibliotecas desempeñan un papel crucial en el sistema informacional”.

A su vez, Antonio Sánchez Pereyra, subdirector de Servicios de Información Especializada de la DBSDI, agregó que si bien en este momento la IA es un tema de moda, atractivo y emergente, igualmente apasionante es el de los datos abiertos, sobre el cual se debe indagar qué está pasando en el mundo.

Destacó que los datos y la ciencia abiertos se relacionan directamente porque implica abrir no sólo los resultados de la investigación, sino la investigación misma; es decir, el trabajo acumulado de meses y años; además de invertir en repositorios especializados con identificadores, metadatos, curaduría, y esto es importante, pues lo primero que está en juego es la reproducibilidad de la ciencia.

La primera charla del encuentro estuvo a cargo de Steve Diggs, especialista en datos de investigación y gerente de productos de la Oficina del Presidente de la Universidad de California, quien mostró algunas de las principales herramientas de interacción con el público que permiten de manera rápida y efectiva tener un vistazo sobre el conocimiento de la IA y el uso de datos abiertos.

Tras puntualizar que la tecnología moderna ha hecho posible la democratización de la información y que esto ha llevado a generar vínculos entre ambos conceptos, añadió que a medida que se hace expansivo el uso de una nueva herramienta es crucial alimentarla con información de todo tipo que permita al individuo tomar decisiones más conscientes.

Diggs recordó que la paradoja de nuestra era es que recibimos información tan rápido que puede haber divisiones y no siempre se sabe si ésta es verídica o no, por lo que “depende de nosotros, como profesionales en la biblioteca, ofrecer el acceso y dar proximidad a los datos”.

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