En los últimos cuatro años el Instituto de Química (IQ) fortaleció su planta académica con 12 nuevas contrataciones e impulsó proyectos de colaboración internacional como el establecimiento del nodo Berkeley Global Science Institute (BGSI) con la Universidad de California en Berkeley, que ofrecerá la oportunidad de contar con un laboratorio de excelencia.
Así lo informó su director, Jorge Peón Peralta, al rendir su informe de labores del periodo 2014-2018 y en el cual también destacó que entre 2015 y 2017 se presentaron 23 solicitudes de patente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial y ya se obtuvieron tres.
En su momento, el rector Enrique Graue señaló que el Instituto –que cuenta con 67 investigadores y 40 técnicos académicos– ha tenido avances significativos y muestra de ello es que 97 por ciento está en el Sistema Nacional de Investigadores.
Celebró que los académicos recién contratados cuenten con asesorías de comités de seguimiento, integrados por investigadores consolidados, lo que ayudó a que publicaran su primer artículo en los primeros 18 meses, en promedio. “Estos comités son una buena idea que debemos estar imitando”, subrayó Graue.
Ante miembros de la Junta de Gobierno, exdirectores y la comunidad del Instituto, Peón Peralta apuntó que el promedio de publicaciones anuales aumentó en 34.6 por ciento, al pasar de 125.6 a 179. El número de artículos por investigador fue de 2.67 con un factor de impacto promedio de 2.8.
Además de la cantidad, es también importante la calidad, pues en promedio nueve artículos por año fueron difundidos en revistas prestigiadas como el Journal of the American Chemical Society, Chemistry A European Journal, Nature Communications, Drug Discovery Today, Chemical Communications, ChemSusChem, Macromolecules, Catalysis Science & Technology y Scientific Reports.
En cuanto a la formación de recursos humanos, en 2017 el Instituto atendió a 406 alumnos de los cuales 166 son de licenciatura, 121 de maestría y 119 de doctorado.
El titular de la entidad refirió la importancia de los laboratorios nacionales con que cuentan. Por ejemplo, el Laboratorio Nacional de Estructura de Macromoléculas (LANEM) que en los últimos cuatro años ha obtenido la estructura de 41 proteínas relacionadas con los mecanismos de defensa en plantas, el metabolismo de carbohidratos, diversas rutas metabólicas y el desarrollo de herramientas de diagnóstico.
El Laboratorio Nacional de Ciencias para la Investigación y la Conservación del Patrimonio Cultural (LANCIC) tiene proyectos en colaboración con la Escuela Nacional de Restauración del INAH y el Instituto de Investigaciones Antropológicas, mientras el Laboratorio Universitario de Resonancia Magnética Nuclear (LURMN) apoya la investigación de frontera y promueve el desarrollo de iniciativas de colaboración interdisciplinaria.
El Instituto, prosiguió, cuenta con ocho laboratorios de Servicios Analíticos que realizan más de cien análisis a la semana y están certificados por medio del Sistema de Gestión de la Calidad y la Norma ISO 9001:2015.
Igualmente, operan el Centro Conjunto de Investigación en Química Sustentable (CCIQS) de manera compartida con la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), donde laboran 14 académicos de la UNAM.
El año pasado se atendieron 288 estudiantes, se publicaron 83 artículos y titularon 21 de licenciatura y graduó a 18 de maestría y 12 de doctorado.
Finalmente, expuso Peón Peralta, se formó un comité de equidad de género que ha organizado seminarios y cursos; y en 2016 se festejó el 75 aniversario del Instituto de Química con la organización de un simposio que incluyó conferencias de científicos reconocidos internacionalmente, entre ellos dos premios Nobel.
En la Biblioteca Jesús Romo Armería, el coordinador de la Investigación Científica, William Lee Alardín, reconoció los esfuerzos por renovar su planta académica y que tenga ya resultados tangibles del trabajo de los nuevos investigadores.
Comentó la relevancia de que haya un comité de equidad de género y subrayó las colaboraciones con otras universidades como el Centro Conjunto de Investigación en Química Sustentable con la UAEM y la Universidad de California, en Berkeley, proyectos que podrán consolidarse con los nuevos investigadores.