La educación, antídoto contra la desigualdad

Guanajuato, Gto.- La desigualdad es un mal de ayer y de hoy, y la educación es uno de los antídotos contra ésta, pues ayuda a generar equidad de oportunidades y crecimiento incluyente, afirmó José Narro Robles, exrector de la UNAM y coordinador de la nueva Cátedra Extraordinaria Educación para el Desarrollo Social y Humano.

Tras la inauguración de dicha Cátedra entre la UNAM y la Universidad de Guanajuato, Narro sostuvo que la educación es un derecho humano, un imperativo ético, y junto con la salud y el empleo son factores de progreso que permiten el avance de una nación.

“Si queremos innovar, eduquemos; si queremos formar ciudadanía, eduquemos; si queremos promover valores laicos, eduquemos”, aseveró al ofrecer la conferencia magistral México, la educación y el desarrollo.

Narro Robles hizo un recuento de los avances que ha tenido el país, de 1950 a la fecha, y aunque hay cerca de 36 millones de estudiantes en todos los niveles, aún hay pendientes como atender la población analfabeta, aumentar la cobertura en educación superior –en especial en las comunidades indígenas, ya que sólo dos por ciento accede a las universidades–, así como tener en cuenta los temas de género, entre otros.

Aseveró que en la Cátedra a su cargo se resaltará el valor de las entidades de educación superior y se invitará a expertos y a las comunidades universitarias a ser críticos pero propositivos, pues “al país le urgen propuestas, no un recuento de los daños”. Conminó a que “encontremos fórmulas para hacer que esas realidades empiecen a cambiar”.

Previamente, el rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers; su homólogo de la Universidad de Guanajuato, Luis Felipe Guerrero Agripino; y el secretario de Educación de ese estado, Jorge Enrique Hernández Meza, inauguraron la Cátedra Extraordinaria en la que también participa la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) Unidad León.

Esta Cátedra fortalece los lazos centenarios de ambas casas de estudio en la búsqueda de un México y de un mundo más justo y menos desigual, señaló el rector de la UNAM. “Porque a fin de cuentas, esa es la razón de ser nuestras universidades: educar, investigar, crear e innovar para propiciar un desarrollo –individual y colectivo– humano, sostenible y con compromiso social”, recalcó Graue en el patio de estudios de la División de Derecho, Política y Gobierno, de la Universidad de Guanajuato.

Sostuvo que las universidades públicas son comunidades conscientes de sus libertades, de su autonomía y del entorno en el que viven, lo que representa una base muy importante para realizar análisis de momentos como los que vivimos, en los que el rumbo es incierto, cuando la polarización, la descalificación, la inseguridad, y diversos fenómenos de la posverdad parecen imperar ante realidades palmarias.

El rector expresó que todos estamos ciertos que los proyectos del pasado no siempre dieron los resultados esperados y ello contribuye a que estemos en búsqueda de otros nuevos, pues hay incertidumbre y por momentos pareciera que nuestras sociedades están perdiendo el rumbo que llevaban.

El rector de la Universidad de Guanajuato, Luis Felipe Guerrero Agripino, expuso que ante el escenario complejo que se vive, la colaboración debe ser lo que guíe el camino de las instituciones de educación superior. “Por más fortalezas que tengamos las instituciones y las personas, jamás podrá compararse lo que podamos hacer en lo individual como lo logrado en el ámbito interinstitucional. Este imperativo social es lo que marca esta Cátedra Extraordinaria”.

Recordó que los vínculos de su universidad con la UNAM son profundos y reconoció que esta última es la “casa de estudios de México” y forma parte del patrimonio educativo del país.

La Cátedra, agregó, servirá para recordar que las universidades fomentan la búsqueda de la verdad, el pensamiento crítico y abierto a todas las expresiones. Además, se pronunció porque a esta sinergia se sumen otras instituciones y estrechen sus lazos de amistad.

Guerrero Agripino afirmó que el inicio de este espacio de reflexión, bajo la coordinación del exrector Narro Robles, es un buen augurio, pues el también exsecretario de Salud federal es ejemplo de universitarios que saben vincular la función académica y el servicio público.

La directora de la ENES León, Laura Susana Acosta Torres, señaló que es necesario tomar la enseñanza como pilar para el desarrollo social y económico del país, y ello requiere un cambio de paradigma en la educación superior, la ciencia, la tecnología y las humanidades. También es imperante una visión de la educación a largo plazo, una política activa que invierta en el bienestar de los jóvenes y promover entornos educativos estimulantes.