Debe ser capaz de responder a nuevas dinámicas
La seguridad social, sistema articulado, solidario y universal
No tiene que estar sujeta a fluctuaciones presupuestarias o administrativas: Leonardo Lomelí Vanegas
El rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, afirmó que la seguridad social no puede concebirse como un conjunto fragmentado de medidas sujetas a fluctuaciones presupuestarias o administrativas. “Debe entenderse como un sistema articulado, solidario y universal, capaz de responder a las nuevas dinámicas socioeconómicas y culturales”.
Al inaugurar el Primer Congreso Internacional de Seguridad Social, organizado por la Facultad de Derecho (FD), en alianza con la Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS), destacó que ha habido un retroceso preocupante en cuanto a este derecho: en 2022 la mitad de la población carecía de algún nivel de seguridad social, mientras que en 2020 era del 28 %.
“El presente plantea coyunturas que nos obligan a repensar los fundamentos y alcances de la seguridad social en el siglo XXI. La creciente informalidad y precarización laboral, la expansión de la economía de plataformas, el envejecimiento, la migración, la salud física y mental, las crisis climáticas y socioambientales, y la revolución digital transforman sustancialmente los modos de producción y reproducción de la vida”, aseveró.
A ello se suma la continuidad de profundas inequidades de género, clase y territorio que limitan el goce de derechos reconocidos normativamente, abundó el Rector ante el coordinador de Vinculación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Emilio de Jesús Saldaña Hernández; la directora de la FD, Sonia Venegas Álvarez; del secretario general interino de la CISS, Pedro Kumamoto Aguilar, y de la coordinadora del Congreso y profesora de la FD, María Ascensión Morales Ramírez.
En el Aula Magna Jacinto Pallares de la FD, Lomelí Vanegas también refirió que la seguridad social no es un tema accesorio de políticas públicas ni una categoría meramente técnica: constituye un eje civilizatorio que condensa valores fundamentales como la justicia distributiva, la solidaridad intergeneracional y la garantía de derechos que sustentan la vida en común.
Por estas razones, agregó, es imprescindible incorporar enfoques históricamente invisibilizados: las economías del cuidado, la interseccionalidad, los sectores informales y las afectaciones diferenciadas por género o etnia. “Construir una seguridad social justa exige cuestionar las jerarquías históricas que han dejado a millones fuera de su alcance efectivo”.
Diversas perspectivas
En su oportunidad, Emilio de Jesús Saldaña –quien acudió al Congreso en representación del titular del IMSS, Zoé Robledo Aburto– sostuvo que la seguridad social es un derecho que refleja la lucha y reivindicación social de trabajadores mexicanos, y que logró evolucionar al interior de la UNAM desde diversas perspectivas: cuidando a los trabajadores y acompañando a los estudiantes, quienes por un decreto presidencial de 1998 están incorporados al régimen obligatorio del Instituto.
Indicó que la relación entre la UNAM y el IMSS también ha sido una causa política, pues juristas de esta casa de estudios como Antonio Ortiz Mena, Jesús Reyes Heroles e Ignacio García Téllez han sido de los máximos exponentes de la seguridad social.
Previamente, Pedro Kumamoto apuntó que en la primera edición de este Congreso Internacional se abordarán temáticas como los desafíos en pensiones y jubilación, reformas en América Latina, extensión de la seguridad social, plataformas digitales, protección de trabajadores independientes, igualdad de género en la seguridad social, protección de las personas trabajadoras informales y la relevancia de la salud mental en los sistemas de bienestar.
Detalló que es el espacio idóneo para debatir estos tópicos con un enfoque amplio, crítico y propositivo; insistió en que la relevancia del encuentro radica en asumir que la seguridad social no es responsabilidad exclusiva de los gobiernos o instituciones, sino que nos relaciona a todas y todos.
Antes, Sonia Venegas dio la bienvenida al Congreso que se realiza por primera vez en esa entidad académica y que contará con la participación de especialistas de Iberoamérica: México, España, Argentina, Colombia, Perú, Uruguay, Cuba, Chile, República Dominicana, Costa Rica y Brasil.
La seguridad social, precisó, es un sistema que los Estados constituyen para proteger y garantizar el bienestar de sus ciudadanos frente a distintas adversidades como son enfermedades, desempleo, invalidez, vejez y muerte. En los principales instrumentos internacionales se ha consagrado como un derecho humano esencial que contribuye al fortalecimiento del tejido social y actúa como mecanismo de prevención y mitigación de la pobreza.
Pero, señaló, en las últimas décadas esos sistemas han enfrentado múltiples retos, pues hay quienes sostienen que su elevado costo es una carga que obstaculiza el crecimiento económico y el desarrollo; otros advierten deficiencias en la calidad de la protección y en la extensión de la cobertura, argumentando que en contextos de creciente desempleo y precariedad laboral se vuelve aún más imprescindible.
