Desobediencia sonora, en el CUT

Llamado a la apertura de nuevas sonoridades

Acto escénico que compila los song books de John Cage; un exhorto a la resistencia no violenta y a la libre reinterpretación

180830_cult2_destaca-princ
Fiel a los principios de libertad musical y a los sonidos sin orden ni jerarquización defendidos por John Cage, la obra Desobediencia sonora, celebrada como parte del Festival IM•PULSO Música Escena Verano 2018, hace un homenaje al trabajo del compositor, instrumentista, teórico musical, poeta y filósofo estadunidense con un acto escénico que compila los famosos song books de este pionero de la música aleatoria y electrónica, en un llamado a la resistencia no violenta, a la libre reinterpretación y a la apertura de pensamiento.

Se trata de una sola pieza de 45 minutos, sin cortes, en los que se mezclan los song books de Cage con sonidos de la vida cotidiana –desde una hoja de papel hasta una máquina de escribir– y movimientos corporales improvisados a cargo de dos alumnos y cuatro exalumnos del Centro Universitario de Teatro (CUT). El espectáculo tiene lugar en una sala con escenografía austera, donde hay un piano y una pantalla casi hundida en el piso con imágenes de circuito cerrado, explicaron Belén Aguilar, directora del proyecto, y Silvia Dávalos, directora musical.

Equipo creativo

El equipo creativo de esta singular propuesta está integrado por jóvenes de entre 20 y 35 años. La escenografía e iluminación son un trabajo de Jesús Giles, quien le apuesta a la abstracción, muy congruente con las ideas de libertad y desobediencia de John Cage.

Además, Mario Mendoza, compositor egresado del Conservatorio Nacional de Música, colabora con la creación sonora, también inspirándose en la propuesta del autor, pero siempre adaptando la versión disruptiva y reinterpretada del espectáculo.

Aguilar asegura que no es necesario conocer a Cage ni su propuesta para asistir a Desobediencia sonora, sino sólo estar dispuesto, como espectador, a observar y escuchar. “Invitamos al público a vivir una experiencia y no a intentar entenderla. Este espectáculo no tiene una narrativa como tal. Está creado para los oídos, para los ojos y para el resto de los sentidos; no tanto para intelectualizar o entender una historia. Queremos que se dejen llevar. Lo que el público escucha, y siente, son todos estos colores y matices que giraban en torno al pensamiento de John Cage (…), quien no tenía una jerarquía del sonido. Para él, el sonido puro era música, como el de las gotas de lluvia o el de un teléfono (…). Invitamos a la gente a tener esa apertura de pensamiento y de escucha. Dejar de jerarquizar las cosas te abre no sólo en lo musical sino también en la vida”, indicó Dávalos.

El Festival IM•PULSO fomenta la creatividad y el trabajo multidisciplinario de las artes escénicas en un esfuerzo conjunto de los diversos centros de arte de la UNAM. Este espectáculo se realizará hoy jueves 30 y viernes 31 de agosto, a las 20 horas, en la Caja Negra del CUT, en el Centro Cultural Universitario. La entrada es libre, por lo que el cupo es limitado. Se darán boletos conforme vaya llegando el público; se recomienda estar temprano.

Foto: Luis Nolasco.
Foto: Luis Nolasco.
También podría gustarte