Palinuro es un joven aguerrido, idealista y con firmes convicciones de justicia social. Aboga por una democracia real e incluyente y es un acérrimo crítico del autoritarismo priísta, de las desigualdades en México, de la corrupción y de la doble moral de la sociedad mexicana. Una sociedad que no lo entiende, que simplemente lo ve como un revoltoso y un iluso.
Palinuro está tirado en las escaleras de su edificio, al que llegó arrastrándose, ensangrentado y brutalmente golpeado. Palinuro fue perseguido por la policía y los tanques del Ejército sólo por manifestarse en el Zócalo. Palinuro es el retrato vivo (o mejor dicho moribundo a causa de la indiferencia social y la represión del gobierno) del Movimiento Estudiantil de 1968. Como muchos jóvenes de ayer y de hoy, tiene varias esperanzas luxadas e ilusiones rotas.
Con gran sentido del humor, ironía, irreverencia y sátira, pero sin dejar a un lado el momento trágico y doloroso, Palinuro en la escalera o el arte de la comedia, en la cartelera del foro del Centro Universitario de Teatro (CUT) hasta el domingo 9 de diciembre, retrata uno de los momentos más oscuros de la vida moderna de México.
La puesta en escena, sustraída del capítulo XXIV de la novela Palinuro de México, de Fernando del Paso, presenta los días previos a la masacre del 2 de octubre de 1968 –el bazucazo en la prepa 1 de la UNAM, la Marcha del Silencio, los festejos por la Independencia y el ambiente preolímpico– y expone con inteligencia el debate de la sociedad mexicana de aquellos días en torno a la movilización estudiantil.
Como parte de la conmemoración por los 50 años del M68, el CUT decidió montar esta obra por considerar que “reúne la profundidad de la tragedia con la rebeldía, el ímpetu y la resolución juveniles. (Porque) hace posible el encuentro entre el humor, el juego y la riqueza infinita del lenguaje y logra que convivan la irreverencia con el dolor y la rabia”, indicó Mario Espinosa, director de la puesta junto con Clarissa Malheiros.
La Generación 2015 del CUT, la cual merece una mención especial por su trabajo e intensa energía derrochada en el escenario, es la encargada de dar vida a Palinuro, El burócrata, La muerte, El doctor, La portera, La vecina del 15, Colombina, El policía, Scaramouche, Tartaglia, Arlequín y el resto de los personajes que se las tienen que ingeniar para duplicar papeles y desplegar su talento en dos mundos paralelos: el de la realidad y el de la fantasía.
La música en vivo y los arreglos están a cargo de Cristóbal MarYán, quien interpreta desde guitarra y piano hasta violín, chelo y melódica. Igualmente destaca la creatividad de los equipos encargados de la escenografía y el vestuario.
Alumnos, maestros y público en general no se pierdan esta pieza teatral en el foro del CUT (atrás de la Sala Nezahualcóyotl) y traigan a su familia. Las funciones son gratuitas, el cupo es limitado. Jueves y viernes a las 8 de la noche, sábados a las 7 y domingos a las 6.