Réplica oral tras la reactivación de labores

Primer examen presencial en Arquitectura

Michelle Balderrama Silva propuso en su tesis de licenciatura construir el Museo Multisensorial de Arquitectura en CdMx

Foto: Francisco Parra.

Volvió el rubor, el interrogatorio frontal, sin posibilidad de bloquear audio o video. Es la experiencia después del Zoom, la reactivación física del aplauso tras la juramentación y el brazo extendido. Es, tras más de 600 días de “códigos de acceso”, el primer examen presencial de grado: fue en la Facultad de Arquitectura, ante una decena de personas.

Así, la UNAM reactivó la modalidad presencial en los exámenes de titulación. Esta vez, correspondió a Michelle Balderrama Silva, alumna de la Facultad de Arquitectura (FA), presentar su réplica oral.

Michelle mudó en marzo de 2020 su investigación fuera de la Universidad. Como miles de alumnos, se apartó con incertidumbre, en el limbo de la pasantía, pero casi 20 meses después regresó a casa con el grado de licenciada en Arquitectura.

La integrante del Taller Luis Barragán de la FA fue acompañada por algunos de sus familiares en el Aula Mario Pani, bajo precisas normas sanitarias, en donde imperó la sana distancia y el uso del cubrebocas.

Propuesta

La universitaria obtuvo la aprobación del jurado y un Diploma al Mérito por la calidad de su trabajo recepcional que propone la creación del Museo Multisensorial de Arquitectura, en la esquina donde convergen el Eje Central Lázaro Cárdenas y la avenida Hidalgo, en el Centro Histórico de Ciudad de México.

En esta propuesta, explicó en entrevista posterior, se pueden aplicar nuevas tecnologías utilizadas en diversas exposiciones, como galerías virtuales, imágenes en varias dimensiones, que cada vez cautivan a más público en el mundo.

“Es una oportunidad muy grande de poder fusionar la arquitectura con estas nuevas tecnologías, y mostrar algo diferente, rompiendo los esquemas convencionales del museo tradicional.”

Dicho recinto, continuó, proyectaría su vocación cultural y patrimonial de México, además de apegarse a la normatividad en cuanto a construcción de inmuebles en dicha zona que se encuentra bajo la verificación de los institutos nacionales de Bellas Artes y de Antropología e Historia.

Balderrama Silva indicó que el recinto propuesto contaría con una óptima distribución, con salas de exposiciones temporales, zona de servicios y un auditorio para 160 asistentes, espacios que tienen la misión de ser amables con el ambiente y disminuir la huella de carbono.

Recordó que en dicho predio se construyó en los años 40, el edificio de La Mariscala o Edificio Hidalgo, demolido por daños estructurales, y desde hace varios años está convertido en un estacionamiento que en su perímetro ha traído algunas problemáticas asociadas a su abandono.

Muchos retos

Michelle Balderrama relató que durante los casi 20 meses transcurridos de la emergencia sanitaria por la Covid-19, ella se abocó a la investigación y elaboración de su proyecto de tesis, donde incluso vivió la pérdida de uno de sus sinodales a quien durante el examen se realizó un modesto y sentido homenaje.

“En Arquitectura estábamos muy habituados a la enseñanza presencial en donde se podían dibujar planos, rayar sobre ellos, utilizar colores y distintas técnicas, entonces pasar de una manera presencial a una virtual sí arrojó muchos retos.”

Esta modalidad honestamente, calificó, fue complicada, pero fue la dedicación y el compromiso con la Facultad y la Universidad lo que nos hizo concluir este proyecto.

“Sentía mucha responsabilidad con la Universidad, y estoy muy agradecida de haber podido hacer esto de manera presencial, porque poco a poco vamos a ir retomando nuestras actividades como las conocíamos antes.”

Como presidente del jurado, Eduardo Vicente Navarro Guerrero, acompañado de Manuel Hernández Contreras y Enrique Gándara Cabada, expresó que dicho protocolo no era un acto cualquiera, sino que representaba también un momento altamente significativo para la Universidad, no sólo al formalizar y avalar a una profesional, sino además para refrendar que ahora de manera presencial la UNAM continúa con el desempeño de sus actividades sustantivas, para lo que fue creada.

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