Heidi González en el arco
“Pumas es para mí esa búsqueda de consolidación”
Sus actuaciones tienen al cuadro que dirige Marcelo Frigério compitiendo en la parte alta de la tabla
La caminata en las escaleras, el brillo del sol y el cobijo del millar de personas que se dan cita cada 15 días en el Estadio Olímpico Universitario son los primeros indicios que vive Heidi González previo a cada juego. La guardameta se ha afianzado en el marco de Pumas, en el primer torneo como titular de su trayectoria futbolística.
“El tema mental es algo que te desafía todos los días. Es la parte más difícil como futbolista. A mí me ha tocado mucho tiempo estar en la banca, y eso te reta a buscar nuevas versiones de ti. Te desesperas por estar mejor, y hoy Pumas representa la búsqueda de mi consolidación gracias a que me he fortalecido interiormente.”
Los primeros años en la vida de Heidi González no estuvieron rodeados por este deporte, el cual se cruzó en su camino por las amistades de la escuela. “El futbol me gusta desde los ocho años que empecé a practicarlo. Mi familia no es futbolera, a veces mi papá lo ve por mí, pero no sigue a ningún equipo. Mi amor por el futbol surgió de forma espontánea”.
Quería hacer una actividad junto con sus amigos de la primaria. “Armaron un equipo y me uní a una liga de futbol rápido en el barrio. Ahí nació la gran diversión y pasión por jugarlo. Siempre quise ser portera. Estuve en el campo dos fines de semana y al tercero me colocaron en la portería. Desde entonces me gusta esa sensación que provoca estar ahí”.
Por años, el futbol para ella fue un pasatiempo en el que podía ser feliz cada fin de semana. Consideraba que el profesionalismo para una mujer en este deporte era llegar a la selección mexicana, hasta que se inició la Liga MX Femenil en 2017.
“Desde que vi que se jugó el primer torneo de copa yo quería participar. Fue muy emocionante saber que había un espacio de futbol profesional para nosotras. Sí, lo intenté. Hice visorías, pero no me quedé, lo que fue muy decepcionante para mí, por lo que fijé mi objetivo en estudiar.”
Cuando parecía que su vida en el balompié profesional ya se había esfumado, el destino le preparó una nueva posibilidad. “Durante un año y medio solamente me dediqué a estudiar. No hice ninguna visoría. De la nada surgió una oportunidad y me quedé, fue sin que yo la buscara”, recordó.
Ya en el profesionalismo, el panorama para ella fue de incertidumbre. Llegó al América en el Clausura 2020 e incluso obtuvo un campeonato, sin la regularidad que esperaba. Luego estuvo un año en el Atlético de San Luis y otro más en Toluca. Durante esos más de dos años, únicamente tuvo actividad en 18 partidos con tres clubes diferentes.
Heidi González llegó a Pumas de cara al torneo Apertura 2022, con la intención de que fuera el equipo de su consolidación. Luego de año y medio donde tuvo actividad en dos encuentros, alcanzó su regularidad para este torneo, en el que se volvió la titular indiscutible en el marco de las universitarias.
“Pumas para mí significa mi gran punto de madurez, es el club donde busco consolidarme. Es la oportunidad que tengo para mostrarme sólida en la portería y de pertenecer a una gran institución. Mi juventud fue distinta a lo que han vivido otras porteras, que permanecen en un solo club. Por lo que Pumas para mí es esa búsqueda.”
Sabe que representa a todo un club, uno de los más grandes de México, y a un grupo de personas que están detrás de ella. “Cuando piso la cancha pienso en que no sólo es por mí, sino por el club, mi familia y mis amigos. Luego trato de olvidarme de todo para evitar la presión y sólo pienso en el partido”, añadió González.
Sus actuaciones tienen al cuadro que dirige Marcelo Frigério compitiendo en la parte alta de la tabla, en busca de la clasificación. La guardameta suma 13 partidos en este Clausura 2023 y tiene tres metas imbatidas, lo que ha impulsado que la afición la respalde en cada encuentro disputado en el Olímpico Universitario. “El apoyo es algo muy valioso. No había sido titular y ahora que lo soy, entiendo que la afición de Pumas es de las más entregadas. He escuchado cómo me corean en los partidos. Luego ves el estadio y todo lo que suma para que cuando pite el árbitro estés muy lista para jugar”.
A dos fechas de que termine el torneo, Pumas está cerca de clasificar a la fase final. “Sería mi primera liguilla. Luego de tantos momentos en los que tuve que aguantar mucho al no jugar y estar en la banca, ahora estoy segura de lo que quiero: cumplir el primer paso de llegar a la semifinal con Pumas e ir por el campeonato”.