Punto de partida, comprometida con sus juventudes creadoras

“Punto de Partida es un espacio que reúne diversas voces dentro y fuera de la Universidad. Tanto la literatura como las artes gráficas permiten una conexión profunda con nuestras experiencias y las de los demás, ampliando nuestra comprensión del mundo. Estas formas de expresión nos invitan a escuchar y cuestionarnos a nosotros mismos. Por eso, es crucial acercarse a estas disciplinas, para evitar encerrarse en una burbuja y promover así el crecimiento personal,” comentó Aranzazú Blázquez Menes, editora de esta revista durante la presentación del último número titulado Más allá.

Esta entrega, que incluye poesía, narrativa, ensayo, entrevista, reseña, ilustración, fotografía y cómic, se aventura dentro de lo oculto, lo tenebroso y lo monstruoso abordando temas que exploran los límites de la vida y la muerte, del sueño, la razón, el cuerpo, la luz y la psicología, algunas veces con un toque humorístico.

Mario Ulises Maya Martínez, uno de los poetas colaboradores del nuevo número, comunicó su perspectiva sobre el haikú: “Soy egresado de Psicología social de la UNAM, pero siempre me ha atraído la poesía breve. En particular, me interesa el haikú, que se motiva por plasmar la imagen de un momento, similar a una pintura. En Japón, el haikú ha servido como un catalizador social que resignifica los eventos traumáticos de la sociedad. Para tragedias como Hiroshima, las inundaciones y los tsunamis en Fujiyama, los japoneses convocan a autores, literatos y gente común para redefinir esas experiencias a través del haikú”.

Asimismo, Maya explicó por qué fue significativo publicar en Punto de Partida: “Envié un libro y gané el concurso estatal de Baja California Sur. A partir de ahí, pensé que quizás ése podría ser mi camino. La UNAM no sólo me ofreció la oportunidad de estudiar, sino también de aportar al país. Participar en una edición de esta casa de estudios es, sin duda, un honor para mí”.

Por su parte, el ensayista y narrador Eduardo Cerdán, quien también participó en esta entrega, habló sobre el resurgimiento del ensayo: “La no ficción ha ganado relevancia tras la pandemia, proporcionando certeza en tiempos de incertidumbre. La escritora Leila Guerriero ha señalado de manera más drástica que las instituciones tradicionales como la familia y la iglesia, que antes ofrecían certeza, ya no cumplen esa función. En este contexto, territorios como el ensayo o la crónica proporcionan una forma de contención, tanto a los lectores como a los autores”.

En cuanto al objeto de su ensayo Vida y milagros de Guadalupe Dueñas, patrona de lo siniestro, Cerdán manifestó su interés por recorrer las historias de literatas como la ya mencionada: “Surgió al indagar en las genealogías de la tradición mexicana. Así fue como descubrí a estas autoras del medio siglo mexicano, que me cautivaron tanto para la creación como para su estudio”.

Blázquez Menes subrayó la relevancia de Punto de Partida al visibilizar a artistas fuera de la UNAM: “Nos esforzamos por asegurar una variedad de orígenes: no sólo incluimos voces de nuestra Universidad, sino también de otras y de diversos estados del país”.

Trilce Zúñiga Loyla, egresada de la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado “La Esmeralda”, es una de las ilustradoras colaboradoras del último número de Punto de Partida y una de estas artistas invitadas externas a la institución, y señaló: “El dibujo es mi medio de aprendizaje; es una herramienta para conocer el mundo. He accedido a toda clase de temas inesperados a través de él. Puedo explicar mi labor artística en términos de micropolíticas o en un contexto mucho más local, que es lo que realmente me importa. Por ejemplo, en el caso del cómic Incógnitas de mugre, publicado en el presente número, sólo alguien que vive en México puede entender completamente su significado.

Apoyando esta perspectiva de interconexión, Blázquez Menes enfatizó que “cada generación enfrenta sus propios problemas sociales, políticos y existenciales, los cuales a menudo se entrelazan con lo personal. Por ello, espacios como éste son clave no sólo para permitir la expresión, sino también para dejar un registro de cómo cada generación vive y enfrenta estos desafíos. Además, fomentan el diálogo intergeneracional, permitiendo conocer cómo se viven y superan ciertas situaciones.”

Finalmente, destacó el compromiso de la revista con las juventudes creadoras: “Para las y los autores jóvenes es muy difícil acceder a grandes editoriales, por lo que este proyecto, junto con otros en los ámbitos estatal y privado, proporcionan ese impulso necesario para respaldarlo. Su principal motivación es dar voz a la comunidad. Por ejemplo, varios artistas gráficos que publicaron en esta revista, después han visto sus trabajos expuestos en lugares como el Museo del Chopo y otros medios. Muchos estudiantes tienen talento excepcional, y esta publicación desempeña un papel crucial para ayudarlos a profesionalizar sus carreras”.