Firman convenio UNAM y Pluralidad Indígena
Se preservará el patrimonio lingüístico y cultural de México

Una de las acciones prioritarias de este acuerdo será la promoción de proyectos orientados al estudio y difusión de los acervos bibliohemerográficos, así como la producción editorial en lenguas nacionales.
En la ceremonia, Miguel Armando López Leyva, coordinador de Humanidades, recalcó que esta es una de las iniciativas emprendidas por la dirección del IIB, y es particularmente relevante porque representa un acto de justicia, reivindicación y reconocimiento del carácter pluricultural y plurilingüista de nuestra nación.
Con este acto se intenta reparar progresivamente un faltante en la BNM, que sólo apelaba a una lengua, como si fuera la única hablada y escrita en el país, además de que una universidad que se precie de serlo, no puede prescindir de los alcances de todas las lenguas que se hablan en nuestro territorio, apuntó.
Asimismo, mencionó que uno de los propósitos reflejados en el Plan de Desarrollo Institucional de la Rectoría tiene que ver con el compromiso con los pueblos originarios, no sólo reflejado en sus estudiantes, profesores, investigadores o personal técnico, sino en el análisis y estudio de las lenguas, dinámicas y procesos de los grupos indígenas.
En la Sala Mexicana de la Biblioteca, María Andrea Giovine Yáñez, directora del IIB, explicó que para la BNM la firma de este convenio reviste enorme importancia, por la posibilidad de “acercarnos a la producción contemporánea en lenguas indígenas”, sobre todo considerando que la Biblioteca tiene una importante deuda en relación con las lenguas nacionales.
Somos una Biblioteca que se ha caracterizado por expresarse en una de todas las lenguas del país, y queremos, a través de esta colaboración, resarcir, aunque sea mínimamente, esa deuda; lograr un poco de representatividad y tener la posibilidad de reflejar una nación multilingüe y multiétnica, resaltó.
Si bien la BNM ya cuenta con acervos en lenguas nacionales, la gran potencia del acuerdo es preservar, custodiar, estudiar y difundir la producción contemporánea. “Eso nos motiva, nos entusiasma y está en completa sintonía con nuestra misión”. Con este convenio nos hermanamos para aprender juntos, y lograr objetivos comunes. “Queremos que transmitan al resto de los integrantes de la Asociación y sus comunidades, que la Biblioteca Nacional es de todos los mexicanos, de los que hablan español, y ayuujk, maya o zapoteco”.
Salvador Reyes Equiguas, investigador del IIB, coincidió en que, con esta colaboración, la BNM atiende una deuda histórica con el patrimonio en lenguas nacionales y, sobre todo, con sus hablantes.
Este acuerdo convoca a dos agentes de cambio para sumar esfuerzos, y desde sus respectivas circunstancias participar con la firme convicción de que el patrimonio cultural es también plurilingüístico y, a partir de este principio, consolidarlo, preservarlo, difundirlo y aprovecharlo en beneficio de los hablantes, de los estudiosos y de los posibles interesados en el conocimiento de esta parte fundamental de nuestra identidad cultural, para asumirla y convivir con ella en términos de igualdad y equidad, refirió.
Ahora, la BNM, ateniéndose a su misión como reservorio de la memoria intelectual mexicana en todas sus lenguas, no sólo dispone de su infraestructura y conocimientos, sino de sus voluntades, para crear espacios, concretar el patrimonio escrito en lenguas nacionales y proyectarlo en sus distintos formatos, convocando a los autores, a través de Pluralidad Indígena, a lo que saben hacer: trabajar en comunidad, y tras ello sumar las aportaciones de estudiosos nacionales y extranjeros, y editoriales en esas lenguas, a fin de conformar una plataforma para usos educativos, científicos y de difusión.
Rosario Patricio Martínez, presidenta del Consejo Directivo de Pluralidad Indígena, destacó que la BNM abre sus puertas para incluir, de manera formal y significativa, las obras de escritores de los pueblos y comunidades indígenas de México.
“Con la firma del convenio hoy sembramos juntos una semilla de memoria, dignidad y diálogo. Que este sea el inicio de una colaboración duradera, que honre nuestras raíces y construya un país más justo, más plural, más humano y de respeto mutuo”, enfatizó.
Finamente, Martín Rodríguez Arellano, vicepresidente de esa asociación, dijo que el acuerdo es un paso trascendental para los pueblos y comunidades indígenas, y “nos obliga a trabajar más, a comprometernos con nuestras comunidades y pueblos, y con la BNM”.
Si había dificultad o desánimo, con esta firma nos motivamos a seguir produciendo materiales, porque hay mucho que dar a conocer. La poesía, la narrativa o el teatro indígenas deben estar presentes en todos los espacios culturales y educativos. Y qué mejor que sea en la Universidad Nacional, concluyó.