Senderos del Cosmos, danza multidisciplinaria

Foto: Luz Montero.

Agustina Suárez, bailarina, coreógrafa y rapera de origen argentino, reconoce en su herencia mapuche el corazón de su propuesta dancística. Ejemplo de ello es su trabajo más reciente: Senderos del Cosmos: danza galáctica multimedia, creado para señalar la relación entre la migración, el linaje ancestral de ese pueblo y su propia condición de mujer e indígena.

El montaje, del Colectivo Kimün y dirigido por Suárez, se presentará en la Sala Miguel Covarrubias los días 21, 22 y 23 de marzo a las 20, 19 y 18 horas, respectivamente.

El montaje multidisciplinario es el relato de una viajera de otros tiempos, una cosmonauta mestiza que busca volver a sus raíces y sortea las constelaciones guiada por los astros y su memoria ancestral. Combina en escena elementos provenientes de las danzas folclóricas de la Patagonia, lugar de origen de la coreógrafa, el hiphop y la danza contemporánea.

La idea, en manos de Sánchez, se convierte en una metáfora del movimiento de las personas de un lugar a otro, tanto en el pasado como en el presente, para lo cual se apoya en la cosmovisión de los mapuches y su interpretación de los astros.

“La ficción es el camino que nos lleva por un universo espacial-indígena en el que prevalece el linaje mapuche y la herencia que perdura en nuestra memoria. La pieza es una reflexión acerca de la migración y del movimiento del cuerpo sobre el escenario; trato de reflejar todo lo que tengo encima de mis padres, que son migrantes, tanto del lado materno como del paterno, y de nuestros ancestros, así como mi propia historia como bailarina y coreógrafa, y migrante desde luego”, explicó Suárez.

Para encontrar la relación entre las prácticas rituales de los pueblos originarios, el hiphop, la multimedia y el futurismo, la creadora desarrolló un trabajo escénico que tiene como marco estético la exploración del “futurismo indígena y el retrofuturismo”.

“Partimos de algo muy concreto: la cosmovisión de los pueblos indígenas, en particular la mapuche, pues coincide con muchas preocupaciones hoy vigentes. Esto nos llevó a concretar una ficción que reflexiona acerca de un futuro en el que su visión ancestral se integre a la sociedad mestiza. De esta manera, nos vinculamos con su simbología y el significado que tienen las constelaciones en la tradición prehispánica. Mientras que a nivel estético, nos interesó insertarnos en un mundo de ficción espacial y de estilo futurista”.

“Hemos visto que las instituciones de gobierno ven a los pueblos originarios como si creyeran que no pudieran insertarse en la sociedad mestiza o que no tuvieran influencias de otras estéticas. Les parece que no son parte del flujo social o del avance civilizatorio, lo que ocurre es que tienen una dinámica propia, simplemente distinta. El propósito es el de vincular la cosmovisión de las culturas ancestrales con el presente”, concluyó.

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