Muestra de Rafael López Castro en San Carlos
Suave trazo por más de medio siglo en el diseño gráfico
La Antigua Academia de San Carlos inauguró la exposición Suave trazo. Cincuenta y tantos años de diseño gráfico, de Rafael López Castro.
La Facultad de Artes y Diseño (FAD) realizó una retrospectiva del artista en San Carlos, la cual fue recorrida por el homenajeado, quien recordó en voz alta: “Cuando empecé yo no sabía ni de qué se trataba esto, me ponía a dibujar y a hacer fotos”.
Aconseja a los estudiantes “que sigan con esta vocación, ya se irán enterando, que le agarren el gusto al oficio; hace 50 años dibujaba a mi maestro Carlos Flores Heras. Por eso les pido que se acerquen a los que diseñan y hacen dibujo”.
Sus manos desatienden las órdenes y con cada movimiento traza, indica a distancia, dibuja en el aire, en el hipotético lienzo. En permanente vocación, Rafael López Castro señala sus colores, creaciones contenidas en carteles, portadas de libros o logos para la mnemotecnia de una sociedad apresuradísima que contrasta ahora con sus pausados pasos.
Son alrededor de 83 obras representativas, unas izadas sobre las paredes y otras expuestas dentro de vitrinas. Rafael López Castro asumió el reto de leer un libro, mirar una película, conocer a un escritor u homenajear a un personaje con sólo una imagen, y así lo hizo para los carteles de Canoa de Felipe Cazals, o aquella película permanentemente juvenil, ¿Cómo ves?, en la que se escucha a Rockdrigo González y Jaime López, con las actuaciones de Blanca Guerra y Cecilia Toussaint; o Frida, naturaleza viva de Paul Leduc.
Dio rostro autoral a las obras literarias en los libros de Darwin, Shakespeare y Goethe; las portadas de portentosas obras escritas como el Popol Vuh, Pedro Páramo de Juan Rulfo, Balún Canán de Rosario Castellanos, La Ley de Herodes de Jorge Ibargüengoitia, y de esa serie de Lecturas Mexicanas del Fondo de Cultura Económica. Lo mismo hizo en las creaciones de Efraín Huerta, José Emilio Pacheco, Alfonso Caso; y las ilustraciones a El Llano en llamas de Rulfo, o incluso a la portada del libro México Tenochtitlan del fotógrafo Francisco Mata Rosas.
En la presentación de la muestra, ante académicos, funcionarios y alumnos de la FAD, Mauricio Juárez Servín, director de esa instancia, mencionó que la exposición recupera el valor de dicha profesión y engalana a la Academia.